El planeta Tierra, una gran
esfera con tonos verdes y azulados girando alrededor del Sol, en un vasto universo
donde a pesar de todos nuestros costosos y modernos avances tecnológicos,
todavía aun no sabemos si somos el único cuerpo celeste en donde se alberga
vida, al menos del que se tiene conocimiento.
Aquí en este oasis en el
medio de un universo desconocido según la mayoría de los estudiosos, estamos
todos los seres vivientes que de alguna manera y a pesar de nuestras
diferencias de todo tipo, vivimos en la más absoluta armonía...
Pues, al menos es eso lo
que se dice, ya que de las palabras a los hechos la distancia es corta o larga,
y eso depende de nuestra forma de ver las cosas que vemos, oímos, sentimos,
probamos o experimentamos de cualquier manera y también depende de nuestra
forma de pensar y actuar, sea cual fuere, así decidimos y queramos que sea.
Es por eso que con toda tristeza,
claridad y la total franqueza que se pueden imaginar, digo que el mundo actual
en el que vivimos está total y absolutamente podrido y obviamente uno como
habitante de él es sin dudas un adicto del mismo, esta es una realidad
totalmente indiscutible y comprobable a nuestros ojos, pero que lamentablemente
por inconsciencia, miedo, impotencia, ignorancia, estupidez o por ser cómplice
de todo los males, no lo reconocemos y al menos como se ve a simple vista, es
triste, pero cierto.
En este presente siglo, en el que
todos lo ven con ojos pesimistas gracias a lo que se vio en el siglo pasado, se
observa y se experimenta los males que nos aquejan y que podemos resolver si lo
sabemos entender y sobrellevar, si es que se puede y tengamos el tiempo.
En el mundo actual ocurren
en este momento crisis económicas de proporciones jamás vistas, guerras sin
sentido, malas influencias que están destruyendo a las juventudes, medios de
comunicación así como todo tipo de expresión artística que dan lastima y que
transforman nuestra cabeza en un desastre, la explotación desequilibrada y
voraz de recursos naturales a la par de que ensuciamos el medio ambiente por
solamente nuestras ansias de un falso progreso, y tantos problemas a granel.
En fin, todo mal con todas
sus formas puede estar en todos lados y por estar en "otra onda", aun
no nos daríamos de cuenta de ello.
Estos males aunque lo
neguemos con total seguridad y no queramos pueden estar en cualquier persona,
desde la más rica, hasta en la más pobre, la más sabia y la más estúpida, y
diciéndolo sin ánimos de ofender, hasta dentro nosotros mismos; sin importar
raza, ideología, institución, credo, estatus o condición cualquiera, el mal
puede tener muchos rostros y formas, desde el más sutil y hermoso de todos
hasta el más bestial y repugnante. Y el mundo está así de insoportable, ya que
mientras mal hacemos y dejemos que hagan, mal estará el ambiente que nos rodea,
la sociedad en que vivimos y mal estará nuestra salud y condición de seres
humanos.
Pero, para dejar de ser realista
y no ser tan dramático, también existe la bondad en todo este balde de
pudrición en el que estamos viviendo; sin duda existe el bien, se observa y
quizás mucho de ustedes también.
Hay cosas, situaciones y
motivos que a pesar de estar en este mundo ingrato, vale la pena vivir una vida
buena, darle dedicación y valorarla, en el que uno da motivos para seguir con
vida y dedicárselos aunque sea un poco de nuestro tiempo y recursos a las cosas más
hermosas de este mundo que hacen que este mundo a pesar de tantos problemas y estupideces
al menos valga algo: la inocencia, el amor, la libertad, el respeto, la lealtad,
la razón, las artes, la familia, las ciencias y demás momentos y cosas que
muchos darían hasta la vida por defenderlas que incluso muchos han luchado por
ellas hasta las últimas consecuencias.
El mundo en que vivimos ahora es muy
diferente al de hace doscientos, trescientos años o más, con muchos avances en
salud, educación, tecnología, bienestar económico, libertades y pensamiento
pero a la vez seguimos con los mismos problemas de los que habíamos sufrido en
antaño o muchísimo peores.
Los derechos humanos, la ilustración,
la lucha por la libertad e igualdad ante la sociedad y las leyes, una economía
desarrollada e industrializada, medios de transporte y comunicación más eficientes
y avanzados, el entendimiento de las cosas y situaciones cotidianas y difíciles
(gracias a la ciencia, el humanismo, la ilustración y el racionalismo), la
exploración espacial, la lucha por el trabajo digno, las invenciones y la
avanzada tecnología, los avances y logros en la medicina y demás fueron
nuestros buenos logros a lo largo de nuestra historia.
Las guerras más sangrientas y
destructivas, crímenes más organizados y despiadados, vicios y adicciones más
destructivas, el terrorismo, el fanatismo, el racismo, sexismo, las crisis
económicas frecuentes, las hambrunas, la modificación y destrucción del medio
ambiente entre otros son sin duda nuestros errores y horrores que han existido,
han empeorado y surgido desde nuestra aparición como especie en este planeta.
Aunque esto parezca que estos escritos
se asemejen a un folleto religioso o un manual de supervivencia en sitios
hostiles, pero la realidad es esta: en estos tiempos críticos en el que
estamos, en el que enfrentaremos más adelante en el futuro y como está convulsionado
todo el planeta, debemos sin duda aprender a vivir, sobrevivir, comprender
nuestra existencia, corregir nuestros defectos, ayudar al que te pida ayuda y
al mismo tiempo mejorar como también avanzar en todos los aspectos si queremos
alcanzar el éxito, la verdadera paz, la verdadera felicidad y el bienestar
personal junto con el de nuestros seres queridos o lamentablemente nuestra
existencia y la de todo lo que nos rodea será verdaderamente un completo
infierno.
El mundo en el que vivimos y sobrevivimos
no es más que un caos que no termina a causa de nuestras malas actitudes y la
total inconsciencia de lo que nos rodea, estas cosas no tiene una solución
gracias a nosotros mismos aunque no lo queramos admitir. Y este mismo mundo en
el que nosotros sufrimos puede ser un paraíso, un jardín del edén si
despertamos nuestra forma de entender y hacer las cosas, regenerarnos y
convertirnos en seres con sentido común y de respeto; al mismo tiempo corregir
nuestros errores, para así conseguir ese mismo propósito aunque pensemos que este
deseo sea solo una fantasía, pura charlatanería, la fantasía de un demente, una
ilusión, una absoluta ñoñez, estúpido o algo imposible.
Es posible y obviamente muy difícil
sin duda, pero será posible dependiendo de nuestra decisión, estudio,
planificación y fuerza de voluntad para lograrlo.
Pero también si queremos hacer este
cambio en el mundo, debemos primero ante todo entendernos, analizándonos,
estudiarnos y cambiar nuestros propios errores y utilizar esa fuerza de
voluntad para transformarnos en mejores seres humanos para así transformar
nuestro alrededor, aunque suene algo absurdo, ridículo e idealista, aunque sea
de verdad algo cierto si nos ponemos a pensar con claridad y cuidado. Si se
quiere crear un mundo o se lo quiere cambiar para mejor pues se debe empezar
contigo mismo, con cada uno de nosotros.
Debemos también aclarar que hay que
hacerlo de manera consciente, con una buena educación, sin seguir mentiras, con
el estudio, la mente clara, con la razón y sin una fe ciega; porque a lo largo
de la historia centenares, miles y quizás millones de personas han querido
dominar, robar, esclavizar, culpar y hasta exterminar a otros seres humanos, a
animales y hasta lugares enteros por caprichos, egoísmo, odio injustificado, codicia,
desprecio de raza y clase, locura, vicios, prejuicios, dominación y control
social a favor de sus partidarios, sus aduladores o de sí mismo por medio de la
mentira constante, la religión, la charlatanería, las drogas, medios de
embrutecimiento (las malas artes, mensajes subliminales, la mala educación y
costumbres junto con los medios de comunicación sin ética, la falsa ciencia)
entre otros métodos.
Estas personas por su afán de dominar
y explotar, han querido formar un paraíso en la sociedad, en un país o en toda
la tierra y por lo contrario han vuelto a la misma sociedad y a todo lo que le
rodea un infierno del que es difícil salir.
En definitiva, sin tanto hastío y
palabras: para cambiar para bien a una familia, a una sociedad, un país, y quizás
a todo el planeta, primero se debe cambiar al individuo o transformar su forma
de ser de forma libre y consciente, reformarse o sanar físicamente y de ultimo
ayudar a que otros cuando él se haya regenerado como individuo para su bien y
para los que los rodea ayudando a los demás; cambiando al individuo (que es a la
vez un apéndice de la familia), cambiara en definitiva a la sociedad.
Si esa persona es buena o mala, como
efecto dominó en una cadena también lo será la sociedad y el mundo en el que
vive. Así se ha visto y está comprobado a lo largo de la historia.
Pero para hacerlo se necesita la voluntad
de superación o en casos de debilidad un apoyo: sin lo uno o lo otro, la vida y
hasta todo el mundo ya en problemas sería un desastre de lo que ya es ahora.
Cada uno de nosotros para mover este
mundo se necesita personas que hagan algo por él, bien sea amando a sus
semejantes, salvando vidas, quitando la venda de la ignorancia a otros, protestando
y peleando por el bien general, luchar
por las libertades y deberes; otros de forma importante también lo hacen
entreteniendo sanamente, haciendo obras de arte que nutren la mente o nos
enseñan lo bueno y lo malo de la vida, investigando y solucionando problemas,
reflexionando, descubriendo e inventando para que este planeta y esta vida que
llevamos tenga un sentido o un propósito en el que podamos seguir vivos.
Soy uno de estos individuos que
quieren hacer algo por este mundo y a veces por eso me ponen trabas o me
descalifican para que no surja del infierno en que pueda estar; aunque lo
hagan, luchare para que se logre mis metas, no importa cuántos años pase y
cuando ocurra a mi paso.
¿Y qué tal ustedes?, a lo mejor pueden
hacerlo o tal vez no, pero no soy profeta o adivino para saberlo. Eso depende
de su voluntad o no, de lo que hagan y lo que sueñan, no para pasar el rato con
ilusiones pasajeras sino para hacerlo realidad.
Nací en una familia religiosa y buena en el mayor
de los sentidos a pesar de las ovejas negras que hay en ella, bastante
trabajadora, ocupados y viajeros por cuestiones de negocios, libertarios y a la
vez moralistas, con contratiempos y dificultades, con bendiciones. Sin embargo
a pesar de eso, quizás por cuestiones de mi infancia y mi adolescencia bastante
alocada, mi alma siempre fue rebelde y combativa; la vida y sus sinsabores me
habían convertido en una persona digamos ultra-anarquista no en el sentido
político, sino en el sentido social e intelectual.
Aunque desde niño siempre he sido un come libros
pero no un nerd además de ser investigador aficionado y con la curiosidad de un
gato, mis verdadero maestros han sido: la vida, la muerte, el descaro y el
cinismo, la gente buena y mala que he conocido, la naturaleza, la política, en
fin todo lo que me rodea, aunque los veo desde un punto de vista más racional y
sentimental al mismo tiempo.
En cierto modo debo reconocer que era de
cierto modo un bohemio, una persona que llevaba
una vida más o menos errante, irregular, desordenada, con relaciones fugaces de
pareja sin compromisos ni sentimientos, casi anarquista e informal, libre y
poco organizada, sin que me ajuste a las convenciones sociales (que en su
mayoría son ciertas y otras son absurdas). Pero después, al dejar atrás eso y
hasta el sol de hoy, soy muy hiperactivo, firme y realista en mis opiniones,
cínico y mordaz con mi verbo, alma libre, sin ataduras ni cadenas que me aten
sin razón.
Pero en vista de lo que he observado y experimentado
en el poco tiempo de vida transitada, he llegado a la conclusión de que no toda
la vida es un desperdicio o sin sentido y que todo en la vida no es tan solo un
sin sentido, y es por eso que me he propuesto a darme algún cambio de vida y
actitud, ayudar a los que tienen un problema o destapar cuestiones que nos
enfrentan además de escribir mis reflexiones, expresarme sobre el sentido
verdadero de lo que llamamos “diario vivir” a parte de diversos temas y
problemas que nos ponen a pensar y sentir en carne propia.
También he visto el sufrimiento de los demás, sus
pecados, problemas y dilemas, en el cual desde hace tiempo y quizás
influenciado por mi enseñanza en el hogar aconsejarles y ayudarles en donde se
pueda y cuando ellos decidan y se propongan a cambiar y así podrán fácilmente
buscar solución a su problema.
A pesar de eso, debo reconocer que las cosas que
más no tolero son: las injusticias, que me mientan en la cara, que
descalifiquen y denigren sin razón aparente a los demás y a mi persona sin
motivo alguno, la glorificación de la estupidez, las falsas creencias y ciencias
y por sobre todas las cosas, la traición.
Les seré
sincero con todos los que leen o quieran leerme, ¿me consideran un hipócrita,
un falso, un entrometido o un idiota si hablo de los demás y sus secretos o
problemas si no me incumben o no les cuento los míos?
Pues
depende, depende si es un asunto privado y sagrado o que de forma directa e
indirecta el mismo nos incumba a todos, siempre respetando la decisión de esa
persona o de mi persona dando su consentimiento y el mío a sus palabras,
acciones y sentimientos por acceder a sus problemas y logros, respetando a los
demás, y a mí mismo.
Es por esas razones que nunca me ha gustado, a
menos de que yo lo permita, por razones que me convengan o por mi bienestar,
que se metan en mi vida privada, ni que busquen mis cuestiones e intimidades
sin razón ni permiso, ya que mucha gente que me es cercana al averiguar mi vida
sentimental, social o de índole más privada, tengan la seguridad que todos
ellos repartirán la noticia de cada una de mis andanzas como si fueran una
superestrella y eso es una de las cosas que más detesto y si lo oculto es para
no perjudicar tampoco a los que más amo; y es lo mismo que hago por los demás a
menos que perjudiquen a los inocentes.
Es por eso que si comento algo sobre alguien o de
algún asunto en concreto, yo les aseguro que aparte de tratar de no ofender a
nadie, no me inmiscuiré en su vida intima o privada ni se revelara nada de ella
a menos que esa persona o autoridades así lo quieran o si lo autorizan, o si
los datos fueron obtenidos de fuentes secundarias y no propias. Cualquier dato
o entrevista, investigación o asunto que se plasme aquí en este blog, será
acorde al respeto siempre y cuando se respete el derecho de expresarme con
libertad.
Este servidor y a la vez administrador
de este blog no se considera un todopoderoso, sabelotodo y tampoco un ser
perfecto; pero la experiencia en una vida sin complicaciones y a la vez
bohemia, me permitió ser testigo de situaciones diversas: descubrimientos,
enseñanzas, consejos recibidos, cosas extrañas y curiosas, las cosas buenas que
ocurren, la euforia y los vaivenes de la existencia como también el maltrato y
la crueldad hacia los inocentes, el racismo, la drogadicción, la ignorancia en
general, las injusticias, la corrupción y demás cosas que he sido testigo como
también ustedes lo serian o quizás lo fueron.
Estas y otras cosas más que les
contaría en el transcurso del tiempo y en otros artículos me ha llevado a
investigar, aprender mediante el estudio, los libros y hasta los golpes de la
vida lo bueno y lo malo de esta existencia, sin mirar atrás y solo por recordar
para no volver a caer por tropezar con la misma piedra.
Es por eso que este blog (y se notara
en el transcurso de su existencia en la red) es redactado de forma casi
personal, incisiva en opiniones, clara y hasta de forma didáctica (o sin tantos
rodeos si prefieren), aunque con datos y asuntos verídicos y probados antes de
ser publicados; cualquier falta, error o cualquier contradicción se reconocerá
sin duda, ya que la corrección y la mejora en nuestras actitudes, opiniones y
modo de vivir es lo que nos hace seres humanos.
El contenido y redacción será de forma
diversa: intelectual, profesional, personal, de forma técnica, a veces de forma
literal o ambigua, de forma idiota o muy sutil, bastante acido e incisivo, de
modo respetuoso o políticamente incorrecto según la creencia de algunos, serán
también estos escritos una montaña rusa de emociones de temas, desde las más
santas hasta las más mordaces y hasta sarcásticas sin caer en la vulgaridad, en
la ofensa y en la demencia. Cualquier cosa que se diga será al menos para el
alivio de muchos, en el nombre del buen camino y no para dañar a otros sin
motivo alguno.
Por eso pido disculpas de forma
anticipada y con total y absoluta sinceridad si alguno de los artículos, temas,
opiniones personales el editor y/o articulistas, amigos, ayudantes,
entrevistados o cualquier elemento de este blog ofende o perjudique de forma
directa o indirecta a algunos de ustedes. Sin embargo, debemos admitir que
aunque algunos pocos o quizás muchos de ustedes se sientan incómodos,
alarmados, ofendidos o hasta aborrecidos por lo que se plasma aquí, sin ánimo
de replicar u ofender: primero antes de criticar o atacar sin razón o lógica
empiecen a investigar, mantener la mente abierta y abrirse al entendimiento.
Les digo a los que puedan estar en
contra de este blog por prejuicio, desconocimiento, censura o por el mero gusto
de polemizar, ofender o estar a favor de dogmas, doctrinas irracionales y dañinas
para el mundo, no lo digo como ninguna amenaza hacia ustedes: cualquier ofensa,
discriminación o ataque a mi persona, a los entrevistados, a los articulistas,
a mis colaboradores, amigos, familiares o allegados y al mismo tiempo y sobre
todo a mi prójimo, a cualquier grupo social, racial, ante cualquier pueblo, o
cualquier persona en general sin la justificación alguna o basados en
prejuicios de religión, divergencias políticas, cuestiones económicas o de
cualquier otra clase por el simple el hecho de estar en desacuerdo o de acuerdo
en temas o cuestiones planteadas aquí en este blog, debo decirles con total
franqueza que el mundo y el Internet es demasiado grande para todos además de
ser libre (al menos por los momentos) siempre y cuando esa misma libertad no
dañe o intervenga en la libertad de otros sin motivos claros o por mero
capricho, de cualquier lado que venga.
Es por eso que les digo de parte de
este escritor autodidacta y de parte de todos los que intervienen, ayudan y
publiquen este blog que si quieren que se respeten sus derechos, entonces
respétenos los nuestros y de los demás; si nos ofenden, aunque no les
ofenderemos le responderemos; si intimidan, ustedes mismos serán peores que
cualquier criminal; si nos ridiculizan sin motivo alguno, pues con total
simpleza deberá soportar el fruto de su cosecha, incluso con la misma moneda;
serán cordiales y lo seremos con ustedes. Tomando prestada la frase de un
filosofo diría que no estoy de acuerdo con tus opiniones y ustedes tampoco con
las mías, pero respetare tu derecho a decirlas como también deberían respetar
mi derecho a decirlas.
Resumiendo sin vacilar: respétame y respetare
tu existencia para así yo defender sin frenos y sin miedo alguno tú derecho a
existir.
Aunque muchos tomaran este
blog como una guía de supervivencia en esta jungla de concreto o como un
sinnúmero de idioteces según como se entiende o se dicte por prejuicio, debemos
admitir que a pese a todo lo que ocurre en este convulsionado mundo, siempre
habrá en un rincón donde el sentido común o las cosas buenas de esta vida se
encuentran y eso hace de que esta existencia humana valga la pena, así mismo,
el entender y comprender nuestra existencia y de lo que nos rodea desde el
punto de vista lógico, científico, artístico, económico, social, individual y
humanista de forma más valiente, libre y sin complejos, tabúes ni mentiras es
sin duda uno de tantos propósitos de este blog.
Por alguna razón estamos aquí en este mundo desagradable y a
la vez maravilloso; se debe encontrar ese buen motivo sin lastimar a nadie, y
eso depende de nuestra actitud, de las cosas que nos rodea, de los problemas y
nuestra capacidad de solucionarlos.
No me considero persona de
izquierdas y derechas, fundamentalista ni liberal ni tampoco blanco y negro,
más bien me considero neutral en esos asuntos ideológicos; pero si quiero tomas
esa neutralidad como ideología política, entonces confieso que estoy de acuerdo
en ello.
Por último, debo también decir que no me considero
partidario de ningún partido político, de ninguna ideología en especifico, u
otra creencia; y desde este momento el blog aquí presentado es y será libre,
imparcial e independiente hasta que las circunstancias de la vida y la razón lo
permitan posible.
Este blog será simplemente un lienzo para mostrar aquello
que aunque nos es amarga es a la vez es insípida cuando la sentimos y al mismo
tiempo dulce mientras más tiempo se prueba por siempre hasta que se termina.
Eso sin duda la llamamos VIDA, y de lo que sabemos es una
sola, ¡disfrútala!
La vida es lo suficientemente corta para desperdiciarla en
algo estúpido o nada bueno para ti, si quieres que te recuerden, en vez de
vivir por algo estúpido o para que disfruten otros de tu desdicha, haz algo
bueno para ti , los tuyos y la humanidad, solo así buscaras tu libertad.
La vida es un juego y ese juego hay que saberlo ganar.